Pasaron 6 años desde que empecé a estudiar sobre alimentación vegetariana y saludable hasta que descubrí que las ollas con las que cocinaba estaban contaminando de metales pesados y otros tóxicos mis estupendas verduras ecológicas.
Descubrir esto es algo potente, pero mi intención no es alarmarte, sino aportar un poco de luz y contarte que hay alternativas.
Cuando queremos llevar una alimentación saludable, tenemos que tener en cuenta no sólo que los ingredientes sean saludables y libres de pesticidas, sino también:
- El tipo de cocción (por eso me gusta la alimentación viva o raw food).
- Los utensilios de cocina, ollas y sartenes libres de metales pesados y otros materiales tóxicos.
Ya sabemos qué pasa con el plástico para uso alimentario, pero aquí voy a centrarme en los materiales de las ollas y sartenes que usamos para cocinar.
Pincha en el vídeo y descubre qué materiales son los más seguros para las ollas y sartenes de tu cocina. También te sugiero al final algunas marcas y dónde puedes conseguirlos:
Muchos de los materiales de las ollas y sartenes que tienes en tu cocina, por el efecto del calor en contacto con los alimentos, pueden desprender metales pesados y otros tóxicos.
Estos metales pesados se acumulan en el cuerpo y el organismo no puede eliminarlos.
No produce un síntoma inmediato (en personas alérgicas o con sensibilidad química sí), pero es una toxicidad lenta con consecuencias diversas a largo plazo.
No produce un síntoma inmediato (en personas alérgicas o con sensibilidad química sí), pero es una toxicidad lenta con consecuencias diversas a largo plazo.
En este artículo te cuento las ventajas e inconvenientes de los materiales más comunes en la cocina, y las conclusiones a las que he llegado yo, por si te pueden servir.
Aluminio
Muy usado por ser barato y ligero, pero en nuestro organismo se instala en el cerebro y está vinculado a enfermedades como al Altzheimer, aunque aún en investigación.
Sólo es seguro si el aluminio no está en contacto con el alimento sino que se sella con el proceso llamado aluminio anodizado.
Teflón y antiadherentes. El problema del PFOA
El teflón es el nombre comercial del politetrafluoretileno (PFTE), famoso por ser el antiadherente más utilizado.
El grave problema de los antiadherentes es el material necesario para unir cualquier antiadherente a su base (ácido perfluoro octánico o PFOA).
El PFOA, además de ser muy perjudicial para el medio ambiente, se asocia con varios trastornos y enfermedades graves como el cáncer, actuando también como disruptor endocrino.
El teflón se deteriora fácilmente, liberando entonces el PFOA y dejando en contacto con los alimentos el material que haya debajo, generalmente aluminio.
Además, a temperaturas superiores a 250º, el teflón desprende tóxicos que, según los propios fabricantes, al ser inhalados por un pájaro pueden producir su muerte. Aunque no lo vinculan directamente al teflón.
Ten cuenta que los hornos con sistema de autolimpieza llamado pirólisis también contienen teflón y se alcanzan temperaturas elevadas. Estos fabricantes también advierten de la mortalidad para ciertas aves.
Actualmente se pueden encontrar antiadherentes libres de PFOA o PFOA free.
Sartenes de cerámica
En una época se pusieron de moda las sartenes de cerámica como alternativa al teflón.
En la práctica, la realidad es que se estropean con facilidad, lo que no lo hace muy sostenible ya que tendremos que sustituirlas con frecuencia. Además, al estropearse deja al descubierto el material que hay debajo, que podría ser tóxico.
Hay que asegurarse de que están certificadas y no contienen metales pesados, PFOA ni nanopartículas.
La nanotecnología no está debidamente probada su efecto para la salud. Como trabaja con partículas tan pequeñas pueden atravesar las membranas celulares, por lo que hay fabricantes que, aplicando el principio de precaución, no usan nanotecnología.
Ollas de barro
Es uno de los materiales más seguros, aunque al ser poroso suelen llevar un esmalte (plomo o cadmio).
Según Hogar sin tóxicos, el barro se puede impermeabilizar en casa empapándolas de aceite y horneándolas.
Hierro colado
Es uno de los materiales más seguros para alimentación, aunque tiene algunos inconvenientes:
- Necesita muy buenos cuidados, secar bien para evitar la oxidación, etc.
- Pesa mucho.
- Se recomienda contener poco tiempo la comida para evitar que pase el óxido. Esto es un tema controvertido. Hay quien dice que este hierro es beneficioso para la salud, y hay quienes no lo recomiendan para un uso diario ya que el exceso de este hierro inorgánico puede ser perjudicial.
- Hay que asegurarse de que las ollas de hierro no contengan plomo en su composición.
También existen ollas de hierro esmaltado, en las que se cubren de un esmalte. Tenemos que aseguramos que el esmalte no lleva plomo ni cadmio.
Acero inoxidable
Acero inoxidable hay de muchos tipos.
El más común en la cocina es el acero inoxidable 18/10 (18 partes de cromo y 10 de níquel). Este acero inoxidable es bastante estable, pero libera metales pesados a la comida al cocinar.
El más recomendable es el acero quirúrgico (llamado tipo 304). O mejor aún, el tipo 316, que es el acero inoxidable de más calidad, menos poroso y más resistente.
Ollas y sartenes de titanio
Hay un tipo aún superior de acero inoxidable, el 316Ti, que es acero de grado quirúrgico con titanio (no se hacen ollas exclusivamente de titanio).
Es hipoalergénico y el utilizado en prótesis médicas, altamente resistente a la corrosión, no poroso y no reactivo ante los ácidos de la comida.
Además es antiadherente, por lo que no hay que añadir compuestos sintéticos tóxicos.
Se puede usar en todo tipo de cocinas (gas, vitrocerámica, inducción e incluso cocina solar) así como en el horno y la nevera.
Es el material que usan las ollas de Saladmaster (las que uso yo!) y son una joyita.
Vidrio
El vidrio, y en concreto, el vidrio borosilicato (el que utilizan en los laboratorios) es el material más seguro para conservar los alimentos.
Para cocinar existe el vidrio vitrocerámico (vidrio y cristales cerámicos), que resiste altas temperaturas. No es poroso ni reactivo. Se puede usar en todo tipo de cocina, excepto inducción.
No las he probado, pero eso sí, parece ser que no son antiadherentes y no sirven para freír.
También me surge la duda de la fragilidad del material en un uso cotidiano.
Está especialmente indicado para personas con SQM (sensibilidad química múltiple).
Mi conclusión y recomendaciones
Antes que nada, mi recomendación para una alimentación saludables es comer más alimentos ecológicos, frescos y con cocciones suaves 🙂 .
Dicho esto, a la hora de elegir tus ollas y sartenes el primer paso básico que haría es no poner en contacto los alimentos con aluminio (incluido el papel de aluminio!), teflón o PFOA.
Si quieres ir un paso más allá y evitar metales pesados y tóxicos en tu comida, éstas son las opciones con las que yo me quedo:
- Vidrio vitrocerámico: aunque no te serviría como antiadherente ni en cocinas de inducción (a menos que uses un difusor). Se pueden conseguir en Pure Nature o Amazon.
- Ollas Saladmaster, de acero inoxidable con titanio. Se distribuye a través de delegaciones por zonas geográficas. Si eres de Gran Canaria, envíame un email y te pongo en contacto.
http://www.viviendoconsciente.com/ollas-sartenes-de-titanio-ceramica-acero/
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